Llegada la primavera a prácticamente todo el mundo le apetece pasar más tiempo al aire libre. Por este motivo, desde hace algún tiempo estamos utilizando nuestro blog para ofreceros consejos sobre cómo tener a punto vuestros jardines y terrazas. Sin ir más lejos, la semana pasada te contamos cuáles son las 6 mejores opciones en suelos para el jardín. Pero… ¿Qué podemos hacer si nuestro jardín es bastante grande?
Dado el caso, puedes optar por hacer tu propio huerto para convertir tu hogar en una vivienda autosuficiente. Existen muchos consejos sobre cómo cuidar un huerto, así que lo que haremos nosotros será guiarte paso a paso sobre cómo hacer tu propia granja autosuficiente. Suena bien, ¿verdad? Pues no te pierdas todo lo que vamos a explicarte.
Cómo dividir el espacio
Para empezar, lo que vamos a contar solo puede hacerse en terrenos relativamente grandes, más o menos de media hectárea. Una superficie bastante común para las casas de campo, que suelen tener gran parte de su terreno sin aprovechar. Y, si este es tu caso, ¿qué mejor manera de darle utilidad que haciendo una granja que te permita tener una vida autosuficiente?
Lo primero que debes plantearte es cómo vas a dividir tu terreno. Lo ideal es que la mitad del jardín la destines a hierba. Dentro de esa mitad, puedes optar por dedicar un 50% del terreno a pastos permanentes para animales. Mientras que la otra mitad del terreno sería buena idea dedicarla al cultivo intenso rotativo. Para ello hay que dividir esa parte en cuatro parcelas: una de ellas dedícala a la grama (durante un periodo de cuatro años) y las otras a productos como patatas, legumbres o vegetales.
Gracias al método de rotación conseguiremos que la tierra respire y el suelo se mantenga fértil para cultivar productos de mayor calidad. Aunque pueda parecer que es poco espacio para cultivar, al ser únicamente para nuestro propio consumo será más que suficiente y no necesitaremos nada más.
¿Qué animales tener?
Otra parte importante, más allá de lo que plantemos, pasa por los animales. Y, en este sentido, si quieres ser autosuficiente debes recurrir a tres: una vaca lechera, cerdos y aves de corral. Te contamos lo que debes tener en cuenta en cada caso.
Vaca lechera
La vaca lechera es un animal muy rentable. Además de proporcionarnos leche fresca, que es muy saludable, también ofrece muchos otros beneficios. Por ejemplo, su estiércol puede utilizarse como fertilizante natural y ecológico. Debes tener en cuenta que, aunque la mayoría del año puede estar en el exterior, durante los meses de inverno debe estar en el interior.
Cerdos
Tener cerdos también es una gran idea en el camino del autoabastecimiento. Deberás proporcionarles un habitáculo en el que estar. No necesitan demasiado tiempo al aire libre, aunque también puedes dejarles pastar en la parte libre de hectárea entre cultivo y cultivo.
Aves de corral
Instala una pequeña casa para este tipo de animales y ve moviéndola para que sean las propias aves las que fertilicen el terreno con sus excrementos. Solo necesitarás un poco de grano y suplementos de proteínas para el invierno. Con tener una docena de gallinas será suficiente para abastecer a una familia entera.